Muy cerca del verano, época de descanso merecido, de vacaciones y de relajo, CÁRITAS nunca coloca el cartel de “cerrado por vacaciones”, porque las necesidades, los sufrimientos no descansan. Es este un buen momento para reflexionar y hacer balance sobre nuestra labor y cómo afrontar la realidad que día a día se asoma a nuestra CÁRITAS, y exprimiéndola podemos concretarla en 3 apartados:
- Los mayores
- Los inmigrantes y
- Los marginados.
Los mayores: Siempre han sido nuestra preocupación principal. Cada día aumenta el número de ancianos que viven solos, en nuestra provincia hay más de 135.000 mayores en soledad. Llevamos años haciendo una labor de búsqueda, puerta a puerta, créannos no es fácil, nos faltan manos, por eso necesitamos ayuda e información. Sabemos que basta a veces con escucharlos, con un rato de compañía, pero también necesitan que se les asesore, que se les acompañe al médico... nos necesitan.
Los inmigrantes: De todos es sabido, basta dar un paseo por las calles, que nuestra sociedad está cambiando a pasos agigantados. Los inmigrantes han llegado a nuestro país y no podemos darles la espalda. Gente de todas las nacionalidades se acerca a CÁRITAS con problemas de todo tipo, ello nos obliga a hacer un esfuerzo mayor de comprensión, de acogida y hasta de imaginación. Vienen con niños, otros se han quedado en su tierra esperando que vayan a por ellos. Tenemos que evitar el racismo y la xenofobia, es tarea de todos.
Los marginados: Siempre nos asalta el fatalismo “¡no tienen solución!”. Es triste, pero forman parte del paisaje, pasamos por su lado y ya no los vemos, forman parte del mobiliario urbano. La droga, el alcohol, las enfermedades mentales, han creado una población que “vive” en la calle, desheredados de una sociedad cada vez más consumista y egoísta. La sociedad del bienestar, que pasa de largo sin mirar la miseria que se encuentra en cada esquina, quizás pensando: “¿y yo qué puedo hacer?” y no hacemos nada.
¡Feliz verano para todos!
CÁRITAS PARROQUIAL
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